Cocción y Técnicas

Noodles: cómo cocinarlos y aprovecharlos

 Te contamos algunas ideas para sacarle provecho a los fideos 

Noodles de arroz, servidos en un plato negro, junto a unos palillos chinos.

¡Aprende a usar los fideos para darle un toque oriental a tus platos!

La inmensa variedad de comida asiática se alimenta permanentemente de la versatilidad de sus ingredientes, como los noodles o el arroz. Son elementos que pueden usarse en platos muy diversos, desde caldos, hasta salteados. En Recetas Nestlé® vamos a explorar el mundo de los fideos y a repasar unas cuantas ideas para usarlos al cocinar.  

¿QUÉ SON LOS NOODLES? 

Uno de los fenómenos de la globalización es que las distancias cada vez son más cortas. No solo nos enteramos casi en tiempo real sobre lo que sucede al otro del mundo, sino que a unas cuantas calles en los supermercados y tiendas especializadas podemos encontrar comidas e ingredientes de Asia y Europa. 

Si pensamos en platos de origen oriental, entre los más conocidos hallamos el ramen y el pad thai. ¿Qué tienen en común? Finalmente, el primero nació en China, es muy popular en Japón y el segundo es tailandés. Aunque hablamos de tres países diferentes, en todos encontramos a los noodles como un ingrediente fundamental. 

En últimas, se tratan de los mismos fideos, solo que su nombre en inglés también es muy popular. Son un tipo de pasta alargada que se puede preparar con distintos ingredientes, de ahí las diferentes clases que existen y que vamos a explorar. Aunque en la imagen más común son delgados, la verdad es que suelen variar en su figura. 

¿Cuál es la una de las grandes cualidades de los noodles? Lo queremos definir en una sola palabra: versatilidad. Como lo vamos a explorar, se pueden usar en sopas, en salteados y hasta fritos; podemos acompañarlos con verduras, mariscos, diferentes tipos de carnes o pollo; es posible combinarlos con sabores dulces, picantes, umami o salados. 

NOODLES, PERFECTOS PARA EXPERIMENTAR 

Vamos a explorar unos cuantos ejemplos concretos de platos asiáticos en los que se usan noodles y que, además, son muy diferentes entre sí. Se aprovechan en platillos con sopas y caldos, pero también en salteados. Pueden ser protagonistas o, por el contrario, presentarse como un acompañante. 

  • Ramen: con fideos de origen chino, pero un plato que nació en Japón debido a la migración entre ambos países, se trata de un caldo que lleva unos noodles de color amarillo y que son gruesos. Aunque existen varias versiones, usualmente está acompañado de huevo duro, carne de cerdo y diferentes verduras. 
  • Pho: los noodles son muy populares en todo el continente asiático. En Vietnam, esta sopa es uno de los platos que mayor impacto internacional ha logrado. Lleva fideos de arroz, que son de color blanco, y se prepara con caldo de pollo o res. Tiene cortes delgados de carne y vegetales. 
  • Pad thai: de Japón, pasamos a Vietnam y ahora aterrizamos en Tailandia. A diferencia de los ejemplos anteriores, este es un plato seco y salteado, que se prepara con noodles, camarones, huevo y verduras. Suele llevar jugo de limón, que aporta un elemento ácido que le entrega profundidad a esta mezcla de sabores. 
  • Yakisoba: los ejemplos que hemos dado son con fideos suaves, pero también está la posibilidad de freírlos para jugar con su textura y hacerlos más crujientes, simplemente se cocinan en aceite tras hidratarlos en agua. Este plato es japonés y lo completa la carne de cerdo, el repollo, la cebolla y la zanahoria. 

RECETAS CON NOODLES Y PASTA:

 

Estos son algunos platos específicos de Asia que demuestran distintas formas de usar los noodles, pero podemos sacar inspiración de otras cocinas para crear preparaciones diferentes. Un ejemplo muy claro es la gastronomía italiana. 

¿Qué tal unos noodles con salsa carbonara? ¿O por qué no probarlos con un ragú de tomate y carne molida? Este tipo de preguntas y creaciones ayudan a combinar diferentes ingredientes. Así podemos conocer a mayor profundidad los mejores juegos de sabores, texturas y aromas.  

TIPOS DE NOODLES PARA TODOS LOS GUSTOS 

Cuando exploramos los tipos de pasta, por nombrar un ejemplo similar, nos encontramos con una variedad importante de formas, como el fusilli (los famosos tornillos o espirales), el spaghetti (que sobresale por ser largo y delgado) o el penne (de forma cilíndrica).  

En el caso de los noodles hallamos menos variedad de formas, pues, en general, son fideos largos. Sin embargo, se preparan con distintos ingredientes que modifican su color, su grosor y la forma de usarlos al cocinar. 

Estos son algunos de los más populares. 

  • Ramen: ¿cómo así? ¿el ramen no es un plato? En realidad, son los noodles quienes le entregan el nombre a esta preparación. Este tipo de fideo, tal vez el más conocido en Occidente, se hace con harina de trigo y lleva un ingrediente que se llama ‘kansui’, que evita que se conviertan en una masa cuando entran en contacto con agua caliente, como un caldo, además de aportar el color amarillo. 
  • Soba: son fideos delgados y con una figura plana, que se preparan con harina de trigo. Se pueden usar en preparaciones frías o calientes, pero su cocción siempre es en agua a altas temperaturas. Su color varía dependiendo del tipo de trigo, si es sarraceno tienen un tono marrón más oscuro que los que se hacen con el común y corriente. Combinan de maravilla con el tsuyu, una base para sopas que tiene un ligero sabor dulce. 
  • Udon: son de color blanco y se utilizan en todo tipo de preparaciones, tanto en caldos y sopas, como en salteados con verduras y carnes. Son más gruesos que los ejemplos que mencionamos, por eso tardan un poco más en ablandarse en el agua caliente.  
  • Lo mein: en realidad, estos son noodles de huevo de origen chino, ahí su gran diferencia con otros fideos. Se cocinan en agua hirviendo y se usan en preparaciones secas, acompañando carnes y verduras. Su color es amarillo claro. 
  • Chow mein: son los mismo noodles chinos de huevo, sin embargo, después de hervirse e hidratarse, pasan por una sartén con aceite para cambiar su textura y quedar crujientes. Por eso es que el color amarillo puede verse un poco más pálido. No suelen usarse en preparaciones con caldo porque pierden ese elemento crocante. 
  • Noodles de arroz: sobresalen por ser blancos y translúcidos, además de ser más delicados que los ejemplos anteriores. Se preparan en agua caliente y están listos en menos de 5 minutos, incluso, no es necesario usar altas temperaturas, únicamente con remojarlos ya quedan suaves. Son los fideos que se usan en la sopa pho, un clásico vietnamita. También son apropiados para completar ensaladas. 

Descubre cómo es la comida de Vietnam.  

  • Shirataki: si los noodles lo mein y chow mein son de origen chino, los shirataki nacieron en Japón gracias al uso de una planta llamada konjac, que aporta el color blanco. Son delgados y se usan, normalmente, en preparaciones ligeras, por ejemplo, en un salteado con verduras o una sopa miso. También son excelentes compañeros del tofu. 
  • Tokoroten: también son de origen japonés y se hacen con konjac, sin embargo, su preparación es diferente. Se hidratan primero en agua caliente hasta formar una especie de masa gelatinosa que luego se corta en la forma de los noodles, para después solidificarlos en agua fría (muchas veces saborizada). 

El resultado es un fideo translúcido y suave que se usa en platos de entrada o postres, siendo un clásico los tokoroten en almíbar. 

  • Veggie noodles: no entran en la categoría de los fideos clásicos, pero este término se usa debido a que parecen noodles gracias a esa forma alargada. Se pueden preparar con diferentes verduras, como zanahoria o zapallo italiano, cortándolos en tiras delgadas, usando los agujeros medianos de un rallador o un espiralizador. Son fabulosos para darle color al plato y combinan muy bien con recetas secas o salsas espesas, por ejemplo, preparaciones con maní o salteados. 

NOODLES VS. PASTA: SIMILITUDES Y DIFERENCIAS 

 

Características Pasta Noodles 
Ingredientes Harina de trigo y agua. Diferentes tipos de harina (trigo, arroz), así como huevos o plantas. 
Tiempo de cocción Puede variar, pero en general está lista entre 8 y 12 minutos. Según el tipo, entre 2 y 10 minutos.  
Color Amarillo y, en algunos casos, tonos verdes y rojizos (como el fusilli). Varía según el tipo, puede ser blanco, amarillo, marrón o verde. 
Forma Hay mucha variedad: tubular, plana, larga, corta, entre otras. Usualmente son largos, pero hay cambios en cuanto a su grosor y qué tan planos son. 
Usos en la cocina Suelen acompañar salsas, verduras y carnes. Se utiliza en sopas, salteados, frituras, platos fríos y calientes. 
Popularidad mundial La pasta es todo un símbolo de la comida italiana, además de ser usada en el mundo entero. Sumamente populares en países asiáticos como China, Japón, Corea o Tailandia. En las últimas décadas, se han expandido por el resto del mundo, pero no tienen la misma fama que la pasta. 

 

En Recetas Nestlé® tenemos alternativas para todos los gustos, desde preparaciones asiáticas, hasta sabores latinoamericanos y nacionales. Explora algunas alternativas de almuerzo para cocinar en casa. 

 

Fuentes: 

https://www.epicurious.com/expert-advice/a-beginners-guide-to-asian-noodles-article 

https://www.thespruceeats.com/asian-noodles-and-cooking-times-4057072 

https://littlethai.es/que-son-los-noodles/ 

https://www.loveandlemons.com/veggie-noodles/  

https://www.tasteatlas.com/most-popular-noodles-in-the-world 

 

Preguntas frecuentes

¿Cómo logro que mis fideos tengan esa textura suave pero firme al morder?

El secreto está en el tiempo de cocción. Cocínalos en agua hirviendo solo por el tiempo recomendado en el envase, generalmente entre 3 y 5 minutos. Luego, escúrrelos y pásalos por agua fría para cortar la cocción. Así mantendrán esa textura ideal, ni muy blandos ni muy duros, al dente.

¿Puedo preparar fideos con anticipación para usarlos después?

¡Claro que sí! Cocina los fideos según las instrucciones, después refréscalos bajo el grifo para detener la cocción. Aplícales un poco de aceite para evitar que se adhieran y guárdalos en el refrigerador. Cuando los necesites, simplemente recaliéntalos brevemente en agua caliente o directamente en el salteado.

¿Hay alguna manera de darle un giro único a los fideos en un plato simple?

Sin duda, intenta agregar un toque de aceite de sésamo tras cocinarlos. También puedes incorporar hierbas frescas como cilantro o albahaca y un puñado de semillas de sésamo tostadas justo antes de servir. Estos pequeños detalles realzan el sabor de tus fideos maravillosamente.