Fácil
45 min
Asegúrate de lavar bien la quínoa. Tostarla le dará un sabor más intenso y una textura más agradable.
Al saltear las verduras, no las cocines demasiado, deben quedar al dente para conservar su textura y nutrientes. Además, esto evitará que se deshagan en el horno.
Cuando prepares la Salsa Blanca MAGGI®, es esencial mezclarla constantemente para evitar la formación de grumos. La adición de ciboulette aportará un toque fresco y herbáceo a la salsa, complementando el sabor de las verduras.
Al armar la lasaña, presiona ligeramente cada capa de quínoa para que se adhiera bien con las verduras y la salsa, esto ayudará a mantener la estructura cuando se corte.