Torta matera

1.  Comienza haciendo la crema pastelera. Para ello, junta en una olla mediana el tarro de leche condensada NESTLÉ® junto al agua y bate para mezclar bien, reserva ¼ de esta preparación para después y lleva el resto a calentar a fuego medio alto, solo hasta que comience a hervir. Junta el ¼ de mezcla que reservaste con las yemas y la maicena y revuelve bien para unificar. Una vez la leche condensada este hirviendo de forma suave, agrega la mezcla de yemas pasando por un colador y revuelve enérgicamente por 5 minutos para cocinar las yemas y la maicena. Una vez consigas una textura espesa, retira del fuego e inmediatamente traspasa a un bowl o budinera que aguante el calor y cubre a contacto con papel film plástico y deja enfriar por completo.

2.  Mientras, precalienta tu horno a 180°C y prepara un molde de torta forrado con una capa de mantequilla y harina. Para el bizcocho, junta en un bowl el huevo con el azúcar, leche, vainilla, ralladura de naranja y el aceite. Bate con ayuda de una batidora eléctrica hasta homogenizar bien. Agrega la harina y los polvos de hornear IMPERIAL® y mezcla de forma envolvente hasta incorporar bien y tener un batido de queque. Vierte el queque en el molde preparado y reserva. Bate la crema pastelera hasta tenerla otra vez cremosa y pasa a una manga pastelera con boquilla rizada, manguea en forma de rejilla sobre el queque crudo y lleva a hornear por 35 a 45 minutos. Pincha con un palito para revisar que no salga con masa cruda y retira. Deja enfriar por completo.

3.  Una vez frío, porciona trozos de 2 a 3 dedos de grosor, decora con ralladura fresca de naranja y disfruta acompañado de un mate recién hecho.