Cazuela de Pollo

Las recomendaciones para elegir los mejores ingredientes para una cazuela de mariscos son las siguientes:  

• Opciones de mariscos o pollo frescos: tienen un sabor más intenso, son suaves y tiernos para hacer que el proceso de cocción sea sencillo. También puedes usar los congelados, siempre y cuando lleves a cabo un proceso correcto de descongelamiento.   

• El tipo de cazuela: dependiendo de la salsa que uses se seleccionan los mariscos. Por ejemplo, si se trata de una salsa de tomate, agrega camarones o langostinos, pero si escoges una de vino blanco, debes elegir almejas o mejillones.  

• El tamaño de los mariscos: procura que tengan la misma dimensión, de lo contrario unos pueden quedar más conocidos que otros.

Las siguientes guarniciones van perfectas con una cazuela de mariscos:  

• Papas fritas o al horno: son un acompañamiento crujiente y versátil. Las puedes servir junto con la cazuela o agregarlas a la preparación.   

• Ensalada fresca: elige los vegetales que más te gusten. Agrega un aderezo o queso rallado.   

• Guarnición de verduras: prepáralas al vapor o en la parrilla. Entre las más comunes están zanahoria, coliflor, brócoli, tomate y apio.  

• Arroz frito o blanco: es una opción versátil y clásica para acompañar una cazuela de mariscos.

Elige cualquiera de estos métodos para conservar adecuadamente una cazuela de mariscos:   

• Congelación: coloca la cazuela en una bolsa o recipiente hermético bien sellado y luego almacena en el congelador hasta tres meses.   

• Refrigeración: guarda la cazuela en un recipiente bien sellado al fondo del refrigerador máximo por cuatro días.   

• Conservación en frasco: desinfecta un recipiente de vidrio sellable, vierte la cazuela de mariscos o pollo y deja un espacio de una pulgada aproximadamente entre el alimento y la tapa para terminarlo de llenar con aceite de coco u oliva. Guárdalo en el refrigerador máximo por un mes.